Orientación Molecular, la revolución del PVC
El poli cloruro de vinilo (PVC) es esencialmente un polímero amorfo, en el que las moléculas se encuentran dispuestas en direcciones aleatorias. Sin embargo, mediante un estiramiento del material y bajo unas determinadas condiciones de presión, temperatura y velocidad, es posible ordenar las moléculas del polímero en la misma dirección en la que se ha producido el estiramiento.
En función de los parámetros del proceso y fundamentalmente del ratio de estiramiento, se obtiene un mayor o menor grado de orientación.
El resultado es un plástico con una estructura laminar, cuyas capas son apreciables a simple vista.
El proceso de Orientación Molecular mejora de forma notable las propiedades físicas y mecánicas del PVC otorgándole unas características excepcionales, sin alterar las ventajas y propiedades químicas del polímero original. Se obtiene así un plástico con unas insuperables cualidades de resistencia a tracción y fatiga, flexibilidad y resistencia al impacto.