La resistencia a impactos es una de las características por las que destaca el caño de PVC Orientado TOM® que Molecor Paraná fabrica en sus instalaciones de Villa Elisa. Esta propiedad de TOM® permite minimizar la posibilidad de roturas durante la instalación del caño o las pruebas realizadas en el lugar de la obra a consecuencia de caídas o impactos de rocas.
Esta característica propia del PVC se ve reforzada gracias a la Orientación Molecular a la que se somete el tubo TOM®, que, con la formación de una estructura laminar en el cuerpo del caño, evita la propagación de grietas y arañazos hacia el interior.
La Orientación Molecular permite que las capas superficiales de la estructura del tubo absorban los impactos, dejando intactas las capas intermedias e internas, por lo que el rendimiento de la pieza no se ve afectado durante su puesta en servicio.
La reducción del riesgo de roturas o grietas también se refuerza con otra de las características destacables de TOM®, la alta flexibilidad que ofrece, con la que se deforma ante presiones externas de forma puntual para, posteriormente, volver a su forma original.
TOM® se presenta así como uno de los caños con mejor resistencia a impactos en el transporte de agua a presión, ofreciendo un comportamiento muy superior al que presentan caños fabricados en materiales convencionales que, debido a su estructura irregular, son más sensibles a tensiones exteriores, que acaban dañando el cuerpo del tubo y requieren de su reparación o sustitución.
Con esta propiedad física, TOM® logra reducir sus costes de mantenimiento frente a otras alternativas y ofrecer una larga vida útil al servicio del transporte a presión de agua para todo tipo de aplicaciones, desde el abastecimiento de agua para consumo humano hasta la entrega de agua para riegos o la impulsión de ésta a embalses.